domingo, 23 de octubre de 2016

Jo mai, mai

Cuando en un aperitivo de domingo sale de tema estrella la letra de una canción es que realmente esas palabras han llegado hondo.

No me gusta imponer ni dogmatizar el valor o la calidad de una obra musical pero con esto de que el premio Nobel de literatura haya recaído en un músico ha habido mucha polémica
.
Una persona que hace que las palabras acompañadas con música sean parte de nuestras vidas, de la vida de nuestros padres o que lo serán de las generaciones futuras se merece el mismo respeto o más que aquel que cuenta una historia extensamente.

Porque la longitud y la extensión no es proporcional a la calidad.

Porque muchas veces menos es más.

Y porque las palabras en un contexto musical ondean libres en nuestros sentidos.



Hoy hemos analizado “Jo mai, mai” de Joan Dausà.


¿Por qué no? ¿Acaso es tan improbable estar enamorado de un amigo? ¿Es tan improbable quedarte con la espina de ese amor que dejaste escapar por miedo, por vergüenza o por circunstancias que ni sabes y te hizo pasar página?

Le ves asiduamente. Te encanta estar con él. Es tu amigo. Le quieres. Te ríes y te diviertes a su lado.
Pero estás casada. Y también le quieres, y también te divierte y lo amas. No lo cambiarías por nada. Eres feliz.

Pero les amas. Les quieres a los dos. Te encantaría tener dos vidas. Te encantaría ser la mujer de los dos. Soñarías con que los días tuvieran dos noches para meterte en ambas camas. Serías feliz llevando esa doble vida.

Tan diferente y tan perfecta a la vez.

Porque los dos te pierden, los dos te enloquecen y los dos irían al fin del mundo contigo.

Pero solo puede haber un libro de familia a la vez.

Solo existe la sociedad de ahora, monógama, posesiva y fiel.

Y es así. Y lo sabes.

Y entonces escuchas esa canción. Esas pocas palabras que dicen tanto en tan poco. Esa tensión. Esas miradas cargadas de alcohol y complicidad que hacen que todo salga a la luz.

Porque hay amores que nos llevaremos a la tumba con nosotros. Hay deseos que nunca confesaremos haberlos sentido y hay sentimientos tan encontrados que te hacen feliz y te duelen a la vez.

La vida son decisiones que vamos tomando a medida que pasa el tiempo. Son caminos que tomamos y otros que dejamos vacíos. Son vasos que llenamos y vamos consumiendo.

Porque tienes la decisión de beber o no hacerlo.


Porque solo con pensar estas decidiendo tu destino.








domingo, 2 de octubre de 2016

Vini, vidi, vici

Volver.
Retomar aquello que dejamos o empezar algo nuevo.
No tener miedo a lo desconocido y al mismo tiempo dejarse llevar por los nervios en el estómago de no saber qué pasará.

Creer.
Saber que es preciso no saber nada para aprenderlo todo.
Cada fallo que cometas será un peldaño más que habrá que superar para mejorar día a día.

Sentir.
Darnos cuenta que tenemos mucho que aportar.  No hace falta esperar nada. Simplemente sentir la necesidad de dar.

Comprender.
Respetar el momento de cada uno. Su necesidad. Su ego. Su fortaleza y sus metas.

Asumir.
El mundo es demasiado grande para que todo sea al gusto de todos.  Escucha, comparte, explica, corrige y decide.

Porque para volver tienes que haber ido ya.

No hay mejor aprendizaje que el propio. Analiza y mejora.

Tiempo por venir, futuro.

El presente es ahora.



Haz.

VVV






domingo, 11 de septiembre de 2016

Objetos perdidos. Personas no encontradas.

Nadie ni nada es imprescindible. Pero cuando alguien o algo que siempre ha estado ahí desaparece se nota.

Todos tenemos nuestro lugar en la vida. En la nuestra, en la de los demás.

Somos nosotros pero también somos el hijo de, la hermana de, el sobrino de… un sinfín de des que aumentan exponencialmente cuando de repente desaparecemos.

La incertidumbre es más dura que la pérdida.

Perder transmite una derrota que nunca podrá ser alcanzada por una mínima esperanza.

Porque es fácil aferrarse a las mínimas esperanzas.

Luchar por causas perdidas y dejar pasar el tiempo.

Y te vas desgastando y todo se va desmoronando. Pero no llega la derrota. La incertidumbre sigue creciente.

Y te ha tocado. Vas degradando tu vida. Pierdes el apetito. Pierdes la esperanza.

Pero de repente un mínimo rumor te la devuelve y vuelves a entrar en  bucle.

Muy duro no encontrar. Muy duro no dejar de buscar nunca. Muy duro gastar tu tiempo buscando encontrar. Muy duro.






Todo tiene un lugar en la vida. Todo objeto que llega a nosotros lo hace por algo más o menos importante.

Cuando se pierde algo superfluo no le damos importancia. Llegó igual que se fue. Nos sirvió durante un tiempo y desapareció.

Pero hay objetos a los que les otorgamos un peso especial.

Hay amuletos que simbolizan la unión de un conjunto de recuerdos que con solo mirarlos te devuelven a un instante irrepetible de tu vida.

Como un anillo.

Un anillo que cayó en el fondo del mar y años después ha sido encontrado por una submarinista que ha creído en el poder actual de las redes de la sociedad virtual.






El anillo ha vuelto al dedo de un marido agradecido por poder mirarlo y recordar momentos que años atrás le hicieron sonreír.




La hija de, la hermana de, el sobrino de, o el amigo de sigue en la mente de todos los que por desgracia les ha tocado dejar de vivir un poco de su vida para intentar encontrar un poco de lo que esperan encontrar de la otra.




Suerte.




domingo, 28 de agosto de 2016

Lazos

Hilos, tiras, cuerdas que mediante un cruce sobre si mismos crean una nueva forma que sirve para adornar, decorar o unir.

Personas, animales o cosas que por circunstancias buscadas o aleatorias terminan compartiendo espacio y tiempo.

Porque todo fluye y cambia. Todo mejora o empeora pero nada queda igual.

Nadie ni nada es igual que ayer ni parecido a mañana.

Porque el tiempo pasado fue diferente y el futuro es incierto.

Lazos que se crean y lazos que se deshacen.

Lazos que se aflojan y lazos que se consolidan.

Lazos, lazos y más lazos que va creando el vivir de cada día.

No siempre ocurre lo que queremos.

No siempre conseguimos mantener los lazos que otros factores aflojan.

Pero influimos.

Influimos en nuestros actos, en nuestras decisiones y en cada palabra y paso que decimos o damos.

Somos nosotros y nuestras circunstancias de hoy.

Seremos nosotros y nuestras circunstancias de mañana.

Pero nunca dejaremos los lazos.

Los cruces de cuerda rasposa, los cruces de raso brillante o los cruces del lazo hecho con un simple hilo de coser.

Relaciones que desaparecieron, que perdurarán, que aparecerán de repente o que se esfumarán.

Tenemos que vivir con eso.

Con lo que somos por lo que fuimos y seremos.

Por buscar la felicidad en nosotros y regalarla a los demás.

Por intentar ser el mejor lazo para la mayor cantidad de personas posibles.

Se puede transmitir la felicidad. Se puede transmitir la paz y se puede transmitir la fuerza y la lucha.

Porque no me gusta rendirme y no quiero gente a mi lado que se rinda.

Porque todos tenemos lazos de sobra para compartir.


No perdamos nunca la oportunidad. 



domingo, 21 de agosto de 2016

Sonorama 2016


Hacía bastantes años que no iba al Sonorama. Gracias a Andoni  y a Rafita por su invitación y preocupación por hacernos vivir una decimonovena edición llena de momentos únicos para recordar.

Pensaba que en Aranda de Duero por la noche refrescaba. Pero quitando la primera noche que sí que era imprescindible taparse, las noches del festival no necesitaron de abrigo.

Ir a un festival de toda la vida es entrar en una micro sociedad en la que siempre somos los mismos y cada uno tenemos nuestra aportación al sistema.

Difícilmente esto ocurre en las grandes sociedades creadas al por mayor durante estos últimos años donde la música ha pasado a un segundo plano y la playa, la adolescencia y el a ver quién tiene mejor cuerpo de gimnasio ha pasado a ser lo más importante del festival (aunque aún no para la minoría que creemos en las micro sociedades).

Me alegró que se reutilizaran los vasos, que los baños mejoraran en su calidad y que el recinto del festival sea una extensión de toda la fiesta grande que sucede durante el día en Aranda.

Porque poder disfrutar de la gastronomía de la zona, de su morcilla y de su lechazo, de la repostería y de los vinos de una de las denominaciones de origen más conocidas en la península es uno de los pequeños placeres que suma a la cantidad y calidad de los grupos y artistas que van pasando por los escenarios del evento.

Terminar de comer, con un gintonic en mano y escuchar Qué nos va a pasar  pinchada por Pop de aquí y coreada por toda la plaza, fue uno de los momentos más emocionantes.

Una apuesta segura de programación es incluir un cabeza de cartel de hoy y siempre al festival  y así tenemos un inicio de conciertos bomba. Porque, ¿quién no conoce los grandes éxitos de grupos de los sesenta?

Con un a primera fila que subía la media de edad, el concierto del Dúo Dinámico como mi primer gran concierto.

También me quedo con poder disfrutar de los conciertos con buen vino y platos de jamón cortados al momento.  Eso sí es hacer un uso especial de todos los sentidos al completo.

Y como cierre de festival  en el recinto (yo soy de irme a dormir pronto y disfrutar del día y la tarde)  Alex Cooper tocando canciones de Los flechazos.

Rodeada de Mods y de sus bailes, de gente a la que aprecio que veo poco pero que sigo en el mundo virtual   (Laura y Óscar, veré Buñuel) y de cantar y bailar recordando los momentos que nos hicieron vivir esas canciones nos damos cuenta que seguimos viviendo en la era pop. (Aunque muchos quieran que nos pasemos a lo hípster).

Rematamos comiendo el domingo junto a Donfluor, que pinchaba en la plaza la sal y fue mi remate de festival y con Manpop.

Rafa venía de pinchar del  festival Medusa Sunbeach de Cullera. Con ellos nos enteramos de la noticia.

Los supersubmarina habían tenido un accidente de coche.

Mucha fuerza para ellos y para la familia.

Llegamos al festival encontrándonos con un accidente mortal en la A7 a la altura de Sagunto y nos fuimos de él enterándonos de esta noticia.

No conozco a los Supersubmarina ni a su música. Pero sé lo que es un accidente. Sé las horas y los kilómetros que se necesitan para hacer una gira y sé que simplemente se puede enviar ánimos y fuerza para aquellos que esta vez les ha tocado a ellos de cerca algo que no deja de ocurrir cada segundo en las carreteras de todo el mundo.






domingo, 31 de julio de 2016

Décimas, centésimas y milésimas

Décimas, centésimas y milésimas de segundo. Un instante. Un cerrar de ojos. El azar. El destino. La impotencia.
Una carretera vacía. Un paisaje pirenaico. La felicidad de al fin poder coger vacaciones.
Largas horas de carretera. Las curvas insufribles  de los puertos de montaña. El Tour de Francia a nuestras espaldas y la hinchazón de unos pies que buscan mojarse en el río.
Aguas cristalinas. Piedras modeladas. Naturaleza en estado puro.
Una familia idílica se divierte en el agua.
Dos niños pequeños mueven sus bracitos recubiertos del plástico hinchado que los mantiene a flote.
La madre toma el inexistente sol en la roca más homogénea que ha encontrado.
El padre vigila a su descendencia y sonríe al ver que aún le quedan 9 días para volver al trabajo.

Estruendo. Ruido a roto. A chatarra. Un peso pesado ha caído al agua.
Pánico.
Gritos.

Y calma.

¿Vivos?  ¿Muertos? Nada.
Un coche ha reventado en nuestras narices.
Unos niños gritan al ver que un objeto que debería seguir su camino por el asfalto ha decidido mojarse justo en el mismo lugar donde ellos estaban aprendiendo a nadar.
Lloros. Una madre aterrada. Un padre atónito. Tres personas que iban a mojarse los pies se despojan de su indumentaria.
¿Hola? ¿Podéis oírnos?
Del maletero del vehículo accidentado  van saliendo letras del Scrabble, cartas del UNO Y billetes del Monopoly.
Porque  todos tenemos gustos simples.
Por fin aparece una cabeza por el lado izquierdo del coche postrado en estado lateral. Sangre en la ceja  y nervios a flor de piel.
Hay alguien más. Una chica. Pierna retorcida. Hay que sacarla.
Llamada a la ambulancia.
Guardia civil. Bomberos. Médicos. Enfermeras.

Sobramos.

De vuelta a Aínsa me doy cuenta de que no me apetecía mojarme los pies.
Pero lo hice.
En ese instante.
En el mismo instante que un chico joven que se trasladaba con su pareja hacia otro punto de la geografía mundial perdía el control de su vehículo blanco y se precipitaba en un río de aguas cristalinas en el que unos niños aprendían a nadar junto a unos padres que hubieran deseado haber estado trabajando en la otra punta del país.
Porque las casualidades existen y en ese momento tenían que estar tres jóvenes que decidieron parar a mojarse los pies junto a una familia de revista en un paisaje pirenaico de vuelta del tour de Francia y de camino a una de sus paradas anuales.

La cena anual en el restaurante Callizo de Aínsa.


Lo que no le pase a Rosa Martí y sus acompañantes.

Afortunadamente esta vez, no hubo víctimas mortales.


Putos accidentes.




domingo, 10 de julio de 2016

23 d'Abril de 2016 - Marga Martí - Violeta Martí - Iris Martí

Quantes vegades celebrem un aniversari, una victòria, un naixement, unes vacances, un aprovat...en fi, dies assenyalats al calendari.
Malauradament, quantes vegades ens oblidem de celebrar el que tenim a diari; el que en un principi no ens resulta excepcional, allò que considerem més bé monotonia.
I és que, quantes i tantes vegades oblidem valorar tots eixos moments que formen el nostre present i que poc a poc, construeixen el nostre futur.

Avui, és per a nosaltres una data assenyalada , 23 d'abril del 2016, que simbolitza la unió d'una historia que ha florit poc a poc .

Un dia significatiu , el dia de Sant Jordi. El sant d'un dels protagonistes d'aquesta història, per la qual, avui ens reunim. Celebrem el Dia del Llibre i la Fira de les Roses, símbols de la cultura i l'amor. Els dos substantius que per a nosaltres millor us representen, alhora que, també representen la professió que compartiu, ser mestres. Però, si hem de dir alguna afició que us uneix, sense cap dubte, és la música; l'art que recerca la bellesa formal i l'expressió d'emocions... eixe art que ha permès que des de ben petits les vostres vides es creuaren.

En aquell precís moment, les dues línies rectes paral·leles de les vostres vides es creuaren per primera vegada. Dues línies que durant el seu recorregut han tingut moments d’esplendor i de feblesa, però, que finalment han decidit ser secants per poder compartir l'amor que ens brinda la vida. Línies, que cada vegada s'apropen més buscant objectius comuns. Objectius de present i de futur, que amb dedicació i constància aneu aconseguint. I no sabeu quant ens alegra.

Expressar en aquestes línies la felicitat que sentim és impossible. Alhora, també sentim l'enyorança de no tenir amb nosaltres en un dia tan especial al nostre pare, qui segur estaria molt orgullós de vosaltres. En especial de la seua filla major, qui demostra dia a dia que amb bondat i amor tot es pot aconseguir.

Rosa Mari, Com oblidar tot el que ens has ensenyat, has sigut i segueixes sent un dels nostres referents, una germana a la que admirem en tots els aspectes. Quan tanquem els ulls, encara podem viatjar a alguns moments de la nostra infància en que ens adintraves en l'era pop a través d'algunes cançons, o quan ens deixaves sentir-nos perruqueres professionals experimentant amb la celebrity dels “Pleasant Dreams”.
Moments inoblidables en la nostra memòria.

Però avui es un dia de mirar al futur, i ens  agradaria desitjar-vos un camí ple de felicitat i amor, que conteu amb la sort de cara per a que els vostres desitjos i esperances siguen certes. Perquè el demà pot donar-vos la més gran de les alegries però, com ve dèiem, tot comença amb l'avui.

Aquest dia, és el començament d'un llarg viatge, que anireu redactant al vostre llibre, i esperem que aquesta primera pàgina ja comence per ser excepcional. Entre tots, intentarem fer el possible perquè així siga.

Que sigau molt feliços.

Us estimem.



domingo, 3 de julio de 2016

El carro, el viento y la barca

Hace dos semanas conocí a una persona que ha vivido conmigo la transformación de una nueva etapa laboral.

-          Tienes a alguien detrás que te cuida y te protege. - Me dijo- Lo estoy viendo en este mismo instante. Tiene algo especial en el pelo y le gusta vestir bien.

No entendí nada y me giré. Detrás de mí no había nadie. Pero ella le veía.

Después de aquello, que me dejó totalmente asombrada vi que las personas que nos dejaron en este mundo nunca dejarán de acompañarnos en nuestro camino.

Porque yo he dejado de estar acompañada físicamente de dos personas que me enseñaron, me formaron, me quisieron y me apoyaron.

Pero sus enseñanzas, su formación, su amor y su apoyo siguen estando aquí. A mi lado.

Fuimos a la playa y después de hablar con la melodía de las olas rompiendo sobre las piedras y el viento alborotando los pelos de locas que se nos estaban poniendo, nos hicimos un helado y volvimos a casa.

Una avenida marítima que une pueblo y playa y aloja una pequeña ermita en honor a Santa María Magdalena.

-           Coge una carta  - me dijo – Los espacios sagrados, sean de la religión que sean, transmiten paz y tranquilidad y en ellas los pensamientos positivos y de esperanza se amontonan en busca de plena felicidad.

Nunca había visto una baraja del tarot en persona. Tampoco soy yo de mucho misticismo, pero después de las conversaciones de aquella tarde mi instinto me decía que tenía que elegir uno de aquellos cartoncillos.

-          El carro -  Me dijo- Vas a tener que coger las riendas de un reto importante, algo que te supondrá una carga de responsabilidad y de iniciativa en frente de un grupo de personas.

No entendía nada. Sí, sabía que en mi trabajo el equipo directivo del centro decidía terminar sus 13 años de trabajo, sabía que nadie habíamos presentado proyecto para relevar pero no  sabía si era mi momento, mi destino o mi responsabilidad.

Volvimos a casa (algunas más desconcertadas que otras) y al llegar al portal sonaron las doce campanadas de media noche  (tener un campanario pared con pared facilita que sucedan estas cosas).

-           Ahora es el momento, vuelve a coger una carta.

Ya medio de risas, medio de broma, volví a coger la carta.

El carro.

Fuera lo que fuera, era para mí.

                                                                    …

En la vida, llegan momentos en los que tienes que implicarte. Nada mejora solo. Todos tenemos la obligación, dentro de nuestras posibilidades, de intentar hacer las cosas lo mejor posible y de transmitir lo mejor de nosotros mismos a los demás.

Ese día iba a llegar. Todos lo sabíamos. Pero no sabíamos cuándo.

Si en un colegio un equipo directivo termina y no hay un proyecto nuevo que continúe el trabajo que se está haciendo, el inspector o inspectora asignada al centro visita las instalaciones para tantear e intentar mediar para que de esa visita surja un nuevo equipo directivo para al menos un año.

Hubo reuniones, conversaciones y conclusiones de todo tipo. Solo la persona que las vivió todas sabrá qué resultado sacar de toda esa mañana de tertulia que se realizó en un aula de pedagogía terapéutica.
Después de un rato de conversación su pregunta fue clara:

-          ¿Estas dispuesta a tirar del carro?

-           Estoy dispuesta a lo que haga falta.

Ya había cogido el carro.

                                                                      …

Trabajo y más trabajo. Horas y más horas. Julio para mí era un mes de vacaciones y en estos momentos se está convirtiendo en un mes de cambios, aprendizajes, ideas, problemas y consensos.
Porque ya hemos cogido el carro. Ya somos un equipo con ganas de trabajar y de transmitir que todo se puede conseguir con ganas y buena voluntad.

Porque si para algo sirve un equipo directivo en un colegio es para conseguir trabajar conjuntamente toda la comunidad escolar por algo que, para todos los que la formamos, es lo más importante: Los niños y niñas que se levantan cada día con la ilusión de aprender, de descubrir y de pasar su valioso tiempo con cada uno de sus maestros, maestras compañeros y compañeras.

Y ese es el único fin de todo esto.
                                                                      …

Último día de junio.  Último claustro. Me despierto algo rara. Había dormido fatal. La tarde anterior, nos pasamos unas cuantas horas preparando todas las coordinaciones, y puestos que podíamos ir presuponiendo que íbamos a necesitar en septiembre para ponernos a trabajar en verano e ir adelantando trabajo. Las cosas no cuadran a la primera y una suposición propia no tiene porqué ser una suposición acertada. Pero pensando en lo mejor para todos, las cosas surgen.

Mientras me arreglo, surge una conversación algo extraña.

-        ¿Qué día falleció tu padre?- No sabía a qué venía esa pregunta de Jorge -.

-           El 12 de junio de hace cinco años ¿por?

-          Acabo de ver que tu hermana ha compartido el video que le hicieron los compañeros de trabajo a tu padre en homenaje hace cinco años.

-         Sí, no tengo ni idea por qué lo ha compartido hoy pero lo acabo de ver tumbada en la cama. Les quedó muy emotivo.
-           
Los claustros tienen diferentes puntos del día, el primero, la lectura del acta anterior, se suele aprobar por unanimidad.
Había que hablar de la PGA, de los diferentes planes del centro y de la memoria y autoevaluación de nuestra práctica docente.
Empezamos el momento emotivo.
La actual directora sacaba un papel de entre las hojas de su libreta y leía.

No soy de emocionarme pero cuando escucho a alguien hablar con el corazón lo noto y me llega.

Se crea un ambiente de comprensión, agradecimiento y respeto que con pocas cosas más que con palabras sinceras se puede llegar a conseguir.

De repente los pelillos de los brazos se me empezaron a erizar. Empecé a temblar.

                                                  “Bon vent i barca nova”

No podía ser. Esas palabras. Ese mensaje.

Estaba escuchando a mi padre.

Estaba escuchando el final de cada uno de sus discursos.

Estaba escuchando la despedida del vídeo de sus compañeros que esta mañana me había impregnado de su fuerza.

Las casualidades existen pero la suma de muchas de ellas hace que sucedan momentos tan mágicos como los que viví segundos antes de empezar mi nueva etapa como directora del colegio en el que he vivido los dos últimos años de mi vida.

Porque creo que he aprendido a escuchar a mi interior. Creo que las coincidencias buenas y malas siempre suceden por algo y de verdad creo que mis dos pilares, mis dos pes, mis dos perlas. Pedro y papá. Pedro y Paco. Don Paco. Siempre estarán ahí.


Gracias por darme fuerzas. Espero haber tomado la decisión correcta.

Os quiero.





Y sí, señora directora (como se cachondean mis amigos y amigas) pero siempre Rosa Martí.























domingo, 26 de junio de 2016

Vota y punto

Cambios.

 Muchos cambios a nuestro alrededor.

 Y, sin embargo, después todo sigue igual.

Eliges.

 Y lo haces para bien.  Y lo hacen para bien.

Pero no aseguras nada. No aseguran nada.

Siempre se ha hecho así.

Siempre.

¿Cuánto es siempre?

Nunca.

Los cambios son buenos.

Los cambios son malos.

¿Pero qué cambia?

Todo.

Nada.

Siguen las aguas intranquilas y los cielos inestables.

Nadie dijo que fuera fácil.

Todos dicen que es complicado.

Dudas.

Pactos.

Problemas.

Soluciones.

Incertidumbre.





Vota y punto.





domingo, 19 de junio de 2016

Persigue tu sueño.

Persigue tu sueño.

Nunca dejes de luchar.

Cuando menos te lo esperes llegará.

Llegará de golpe. No tengas miedo. Disfruta del momento.

Visualízalo.

Es tuyo. Lo conseguiste.

Vive.

Pero no dejes de luchar.



Enhorabuena Violeta.
Después de dos años de preinscripciones, de repetir selectivos, de nervios, de listas de espera, de pruebas en universidades privadas en las que sabías que no querías entrar pero que pensabas que era tu única esperanza, de decepciones, de lágrimas.

Lo conseguiste.

Es tuya.

Una plaza en medicina.

Tú y yo sabemos todo lo que significa esa admisión. Ni en Reus, ni en Lleida. En Castellón.
En la UJI.

Muchas veces la vida nos pone a prueba para determinar el grado de implicación que tenemos para aquello que anhelamos.

La vida se ha dado cuenta. Le ha costado. Se hubiera podido dar cuenta antes, es verdad. 

Pero todo ocurre por algo. Y este es tu momento.

Con una formación de dos años de enfermera. Con un expediente brillante y con una madurez que supera dos años la mayoría de edad, te deseo lo mejor en tu nueva etapa.


Papá estaría muy orgulloso de ti.




Se avecinan tiempos de cambios y este, solo ha sido el primero.









domingo, 12 de junio de 2016

Cinco años sin Paco Martí

5 años papá. Mucho tiempo ya.

Novedades. Muchas novedades.

Me he casado. Sí, con Jorge. Quién lo hubiera dicho cuando íbamos a tocar a bodas con nuestro cuarteto o cuando nos llamaban para tocar en misas… La verdad es que me alegro de que lo conocieras aunque solo fuera siendo un niño. Te hubiera encantado la que montamos.

Creo que todas las emociones vividas y sentidas durante el 23 de abril perdurarán en nuestra memoria durante mucho tiempo.

Todas tus flores estaban emocionadas. Les hice un poco padecer porque no les conté nada de cómo iba a ser ni el vestido, ni la ceremonia ni la fiesta ni nada. Todo sorpresa. Pero creo que si les preguntamos ahora, después de haber vivido todo nuestro enlace,  me aprobarían con buena nota.


Violeta sigue estudiando enfermería. Aún no ha podido encontrar la manera de empezar medicina. Es buena en lo suyo y pese que tiene muy claro que quiere seguir intentando entrar, será una buena profesional sanitaria. Eso seguro.

Marga ya ha hecho prácticas en el colegio. La primera vez que te enfrentas a un aula no es fácil. Los dos lo sabemos. En la carrera no te enseñan los problemas y conflictos reales del día a día de los colegios. Pero te das cuenta si es lo que quieres hacer durante el resto de tu vida laboral o no.

Iris termina tercero de Eso. Aún seguimos impregnando tu instituto. Cuantas horas dedicadas a esas cuatro paredes ¿eh? No debe ser fácil dirigir un centro educativo. Aunque siempre he creído que las buenas personas transmiten bien. Hay que lidiar con muchos problemas, muchos egos y muchos egoísmos pero si tú estuviste tanto tiempo en el cargo estoy segura de que también será porque te retornará las cosas buenas que se intentan conseguir con empeño, trabajo y mediación. Mucha mediación.


A veces me paro a pensar cuantas conversaciones nos quedaron pendientes… de trabajo, de la vida, de la familia…

Hay tantas decisiones, tantas dudas, tantos recuerdos que se quedaron sin conversar…
Me encantaría volverme a tomar aquella última horchata contigo. Porque… como tú bien me dijiste hace cinco años y un día, muchas veces nos restringimos pequeños placeres que al fin y al cabo son los que nos hacen ser felices en la vida.


Te echo de menos papá.


Un abrazo muy fuerte de esos que tendríamos que haber realizado más.




domingo, 5 de junio de 2016

23 de Abril de 2016 - Javi Arnau

Supongo que a ellas  (hermanas de la novia) también les habrá pasado. El síndrome del folio en blanco. No saber qué escribir. Borrar una frase tantas veces que le acabamos teniendo miedo, por si ya nunca más aparece otra que la sustituya. Pero, es curioso, cuando te empiezas a enfadar con tu propia inspiración es cuando ella te da la mano. Es algo mágico. Hace sólo un segundo, todo lo que ahora fluye parecía imposible.

Tan imposible como no recordar. Porque reconozcámoslo: la memoria es algo que siempre nos acompaña. A veces, como una bonita melodía. Otras, como el trueno que precede a la lluvia. Cada uno elige qué versión es la que prefiere para sus recuerdos. Pero aunque todos tengamos a una persona ausente hoy, creedme, yo prefiero quedarme con un pasado repleto de música y no con un pasado repleto de llanto. Cualquier otra opción, en este momento, sería imposible.

Insisto. Es imposible no recordar. No recordar gestos, miradas, sonrisas. Historias. Y aquí estáis Jorge, Rosa. Rodeados de gente que os quiere. Rodeados de millones de recuerdos que afloran.  

Es imposible mirarte, Rosa, y no pensar en algo muy especial: que puedo considerarte una amiga. Es imposible olvidar aquellas primeras discusiones de sobremesa que yo ya sabía que iba a perder. Esos aperitivos. Esas conversaciones. Esos consejos tan duros como acertados que siempre me diste.
En fin, por qué no decirlo, era imposible imaginar que acabarías siendo tan especial en nuestras vidas cuando sólo eras una pequeñaja con un violín lleno de sueños.
Ese violín sigue sonando. Esta vez, acompañado. Rebosantes los dos de ilusiones. Una obra maestra. Si alguien se enfrentó con dudas a la partitura, aquí tiene la respuesta: no era imposible.

En cuanto a ti, Jorge…

Os confesaré algo a todos. Este chico es tan especial que ha sido capaz de dejarme mudo. No saber qué decir, qué recordar… El síndrome del folio en blanco del que os hablaba, apareciendo ante los ojos asustados de alguien que se gana la vida escribiendo. Es así y no me importa admitirlo. Lo nunca visto. Lo imposible. Pero al final los sentimientos que emergen del cariño le ganan siempre la batalla a los que van de la mano de la rutina.

Y por eso, encuentro un hueco para los recuerdos. Imposible olvidar a ese niño travieso al que un día tuve que encerrar con llave en un armario. Imposible olvidar esos viajes, modestos al principio, pero que con el tiempo se han convertido en algo que nos distingue. Imposible olvidar esos domingos de mayo, tan mágicos, que tanto nos unieron. Imposible olvidar esas comidas de primos con guitarra y calçot, esos domingos familiares de verano con mucho vino y poco silencio. Imposible olvidar tantas cosas…

¿Sabes qué? Estoy feliz. Por ti, por Rosa, por todos los que estáis aquí. Papis, hoy también es vuestro día. Bailad, cantad, emocionaos… Os lo merecéis. Y si acecha un mal pensamiento, recordad: sólo hay un arma más poderosa que una sonrisa… otra sonrisa.

Y ese último consejo vale para todos. Sobre todo para vosotros dos. No perdáis nunca esa alegría que nos contagia ni esa locura que nos fascina. Os hace únicos.

Jorge, Rosa: sed muy felices.




domingo, 29 de mayo de 2016

Votos #RoJoypunto - 23 de Abril 2016

Rosa, Jorge,
Amb aquestes aliances
Fruit de la màgia de l’amor
Iniciem junts un camí nou 
Circular perfecte infinit
Sense principi ni final
Com l’amor que hui et declare
Amb aquest símbol
Pretenc deixar segellat

L’amor que senc per tu.




domingo, 22 de mayo de 2016

23 de Abril de 2016 - Rosa Martí

Cuenta la leyenda que un apuesto joven salvó a una bella princesa de ser devorada por un dragón que tenía aterrorizada a toda la población.


No existen dragones que derramen sangre convertida en rosas rojas al ser vencidos.


Lo que de verdad existe es gente enamorada que se preocupa por darte lo mejor de si misma.


Parejas que vencen distancias, problemas, preocupaciones y prejuicios.


Porque el amor lo puede todo. Acortar kilómetros, parar el tiempo, cegar, eclipsar, hacer que cualquier tontería suene y sea perfecta e incluso, sacarnos una sonrisa en los días que solo apetecería llorar.


Yo no quería casarme. Bueno, casarme sí. Pero no hacer fiesta. Y ya me veis. Un bodorrio en toda regla.

Gràcies Jorge, per haver-me conveçut.


3 meses para organizar una boda. Imposible, me decían las dependientas de las tiendas de vestidos. Una locura, me decía la gente a la que íbamos invitando.

Pero aquí estamos. Vestidos con trajes a medida, auto gestionando una ceremonia y con toda una noche por delante para pasarla con vosotros.

Elegir, descartar, buscar la mejor opción. Hacer números. Volver a elegir, volver a pensar. Imaginar. Crear desde cero.

Volverme loca comprando por internet. Decorar. Pensar en nosotros. Pensar en vosotros, pensar en los demás.

Me ha encantado el proceso. Ir juntos Jorge y yo a comprar el vestido. No encontrar nada que me gustara y decidir crearlo desde cero. Recorrer 45 tiendas de zapatos en Madrid en un día  y acabar comprándolos a una diseñadora  japonesa afincada en Elda.

Tampoco se queda corto el labial. Sabía que tenía que ser rojo pero... qué rojo? Después de empaparme de video tutoriales  en youtube, de comprarme toda la gama completa del color de la pasión, y de escuchar mil y una historias sobre la transferibilidad de los productos, como podéis ver lo encontré.

Los pendientes los compré anteayer. Muy típico en mi eso de dejar cosas para última hora.

Este texto lo escribí anoche.

Preparar vuestro regalo. Ir disfrutando juntos Jorge y yo de cada minuto del proceso.

Crear nuestra canción.
La canción que define nuestra vida. Cualquier día puede ser un día especial.

Una vida que ha juntado  a dos personas que se conocían de hace muchísimos años. Que ha decidido dar un giro de 360 grados a la amistad para convertirlo en amor y que ha conseguido que dos compañeros de conservatorio que tomaron caminos diferentes en la vida se vuelvan a mirar con diferentes ojos.

Porque así pasó. De repente nos miramos con diferentes ojos.

Todo, lo bueno y lo malo, sucede de repente. Las ideas llegan de repente, la amistad aparece cuando menos te lo esperas, las canciones, surgen de camino al colegio ¿veritat Jorge? Incluso la muerte, aparece sin avisar y te toca.

Y te toca de muy cerca. Y varias veces. Y no entiendes nada y no quieres hundirte.

Pero sucede. De repente. Y nadie puede cambiar la historia. Nadie puede borrar lo malo que nos pasa. Y nadie debería nunca poder hacerlo.

Todo lo que hemos vivido, todo lo que nos ha pasado es lo que nos ha hecho ser hoy como somos.

Soy feliz. Estoy feliz.

Encontrar una persona que sé que me quiere, que me respeta, que me aguanta. Que ve virtudes donde otros verían defectos, que entiende la vida de la misma manera, que se ríe.

Que inventa, que crea, que a su lado incluso los días malos tienen luz. Que hace un sushi de muerte y que al mismo tiempo puedes estar tres meses a dieta que siempre le dará un toque de chef a la montaña verde.

Que me escucha, que me termina las frases que suelo dejar a medias, que intenta ver una peli pero se duerme al minuto cinco y luego quiere que se la cuente entera.
Que me oculta trucos de magia pero al mismo tiempo me pide que le de opinión artística y sobretodo que divaga conmigo.

Porque si fuera por nosotros no habría fracaso escolar. Las horas de disertación educativa podrían valer como tesis doctorales.

La música, nos hizo conocernos, nos hizo ser amigos y nos hizo ser quien somos.

Porque Jorge es especial. Yo no podía casarme con una persona normal. Nadie acabaría poniéndose unos zapatos medio rojos por mí  el día de su boda.

La vida es demasiado bonita para no disfrutarla con un grado de locura.

Jorge y yo la tenemos.

Tenemos la locura de querernos, de pese a ser un cabezón y torcerse cuando algo que tenía planeado no ocurre como debiera, aprende día a día a relativizarlo todo.


Perque vida Jorge,  soles en tenim una i jo he decidit compartir-la amb tu.