viernes, 29 de junio de 2012

España - Portugal


-Cariño, hoy lo vamos a celebrar con oporto. 
- ¿Pero como quedamos el otro día? Yo me levanto a las 6! 
-Aisss ya lo sé son dos años viviendo juntos, sé a qué hora te levantas… pero no me digas que el otro día no lo pasaste bien con el champagne… 
- ¿Y no podemos celebrarlo el viernes? 
-¡Qué dices! ¿Desde cuándo las cosas se celebran dos días después? 
- Voy a por el vino y nos vamos a poner unas buenas copas. Pondré a Arcade Fire, nos emborracharemos y nos quedaremos afónicos. 
- ¿Y los vecinos? 
- ¿Pero no lo oyes?? ¡Todo el bloque está celebrando la victoria de España! 
- Cariño, nadie del bloque se levanta mañana a las 6… 
- Mira, si no quieres pasártelo bien conmigo, me voy a casa del vecino del quinto que ya sabes que siempre me mira de arriba abajo con unas ganas de meterme mano contenidas que sólo con que le dé le dedo se me va a comer entera. 
- ¿Cómo puedes ser tan chantajista?  
- Yo sólo tengo ganas de fiesta y de repetir y mejorar el polvo de el triunfo contra Francia… porque eso sí, ahora ya sabemos que estamos en la final… espero que sea mucho mejor que la otra noche…  
-¿No te gustó? 
-Bufff, claro que me gustó, pero todo se puede mejorar… ve poniendo las copas, yo voy a por unos accesorios. 

A los 10 minutos, salí increíblemente atractiva con un corsé de raso a juego con unos guantes largos, unas medías sostenidas por una liga de encaje y unos tacones que me hacían 15 cm más alta. Todo de color negro con pequeños adornos y transparencias. 

-¡Dios santo cariño! ¡Estas increíblemente preciosa! 
-¿Te gusta?  

No hizo falta responder, sólo de verla le había entrado un calentón que no le dejó pensar ni en horarios ni en madrugones. Sabía que al día siguiente lo pasaría mal, pero también sabía que ya sólo quedaba la final contra Italia. No sabía que le prepararía su mujer pero tenía muy claro que la final la organizaría él.  
A ella no le gustaba el fútbol pero le encantaba celebrarlo todo con buen sexo, mucho lujo y demasiado alcohol…  

Habrá que comprar provisiones de grappa… 





miércoles, 20 de junio de 2012

La eurocopa



Me llené una copa de martini blanco.
Me encanta ver la aceituna flotando en el líquido dulce y transparente.

-¿Te preparo una copa?
-¿Ahora?
-Sí cariño, ha ganado España.
-Pero ¿desde cuando te importa a ti quién gane en el fútbol?
-Pues la verdad que me importa bien poco, pero es una buena excusa para tomarnos un martini juntos.
-Mañana es lunes, el despertador sonará a las 6 de la mañana… ¿no será mejor irse a la cama?
- Ummm… es verdad, vamos a celebrarlo echando un polvo.
-Tu siempre tan explícita…
- Jo… Me apetece...venga, me pondré el camisón de seda negra que tanto te gusta con las medias de rejilla y después te haré un masaje de los nuestros…
- Mañana a las seis…
-Sí… ya… mañana a las seis toca trabajar… ya lo se - y empecé a chupar la aceituna de la forma más sensual que supe-.
-Aisss como sabes ponerme cachondo…
-Cariño siempre consigo lo que quiero, ¿o no te acuerdas de la primera vez que nos vimos?
-Buff... eso no se puede olvidar.
-Me acerqué a ti con un contoneo de caderas exagerado y una mirada penetrante que parecía quererte atravesar. Estábamos en mi restaurante preferido, mis jefes te habían invitado para cerrar un contrato para mi empresa y tu estabas tremendamente atractivo.
-Tu si que estabas tremenda con ese vestido rojo…
-Me senté a tu lado y a los 5 minutos ya te estaba rozando con mi tacón… fue increíble verte la cara de incredulidad respondiendo seriamente a mis jefes… creo que nunca me había excitado tanto esa situación…
- Bufff mira que lo pasé mal… me pusiste a cien y no podía pensar… y aquellos hablando de cifras y de acuerdos…
- Bueno no terminó tan mal… terminamos follando en los baños, cerrasteis el contrato y te casaste conmigo.
-Sí, la verdad que no me puedo quejar…
- Muy bien, pues ya sabes… hazme el amor.
-Para que después digan que la mujer no ha tomado las riendas de las relaciones… ¡Tú lo has querido!
Y se me abalanzó tirándome todo el martini encima.
-Ummm cada día que pasa eres más dulce…
-Y cada día que pasa me gusta más el fútbol… así que ve preparándote el siguiente partido.
- Buff, como gane España la eurocopa…



martes, 12 de junio de 2012

365 días sin Paco Martí

Papá, aún sigo soñando contigo. Fue muy duro verte dar el último suspiro de tu existencia.
Tengo tanto que agradecerte que no sé por dónde empezar.

Recuerdo nuestra última horchata juntos.
-         No sabes el tiempo que hace que no bebía una- me dijiste.
A veces, deberíamos dejar a un lado todo lo establecido como sano y darnos unos cuantos homenajes.
Nunca sabes cuándo vas a dejar de poder hacerlo.

Recuerdo tu cara de angustia en la sala de espera del médico al ver los resultados de las pruebas. No quisiste verlos antes. Los dos solos. Nuestras miradas.
Mis ojos intentando no derramar lágrimas y al mismo tiempo las mejillas empapadas.
No había nada que hacer. Lo sabíamos.
Aún así luchamos el poco tiempo que el destino nos dejó.

Recuerdo nuestro viaje en Bilman Bus de 7 horas a Donosti para despedir a Pedro. Si llego a saber que estabas enfermo, hubiéramos pagado las desorbitadas cifras de los billetes de avión.

CAMPEÓN. Sí, así, con mayúsculas.

Aguantaste mis lloros, la pena de los amigos, el dolor de la familia. TODO.

Me decías que te dolían mucho las piernas. Te dormías en el sofá nada más nos íbamos a descansar. Y yo todo lo acarreaba a la pena. Sin imaginar nada.

No podías más y estuviste ahí, conmigo. Sin conocer a nadie pero consolándome ante un hecho que tú tenías muy cerca y no me quisiste decir.

Ni a mí ni a nadie.

Porque no querías vernos sufrir.

El día que te dijeron que tenías metástasis aún fuiste a trabajar. Nunca dejaré de admirar tu implicación en el instituto en el que, aunque a algunos les pese, has sido el mejor director que conocerá Almenara.

Muchos problemas en el centro estos últimos años y tu siempre al pie del cañón.
Ayudando a todos. Perdonando. Agradeciendo.

A veces pienso que fuiste demasiado bueno.
Otras, siento tanta admiración por ti que ojalá sea ni la mitad de increíble que has sido tú para tanta gente.

Muchas gracias papá. Me inculcaste disciplina, el gusto por la lectura, la pasión por la música y la educación en unos valores que siempre llevaré conmigo.

Recuerdo los cuentos que me contabas por las noches, las horas que te tocaba escucharme estudiar violín cuando aún sonaba a gatos y lo orgulloso que estabas de tus cuatro niñas.
Tus cuatro flores a las que has cultivado todo lo que has podido.

Ya se lo dije a Pedro hace unos días.
Espero que en algún sitio os hayáis podido encontrar.

Yo, en la casa en la que naciste, voy a reunir toda tu música y literatura con todos los libros y discos de Pedro.
Allí montaré una gran estantería en la que, sentados en mi nuevo sofá rojo, nos podremos sentar los tres cada noche, tomarnos una horchata y disfrutar del arte que habéis inculcado en mi vida.


Te quiero papá.




                                              Paco Martí Sanz 25/10/1955 - 12/6/2011